El Trastorno Límite de la Personalidad, conocido como TLP, es una afección complicada que se manifiesta con una notable inestabilidad emocional, problemas para gestionar impulsos, alteraciones en la percepción de uno mismo y relaciones interpersonales desordenadas. Quienes padecen TLP a menudo enfrentan un gran sufrimiento mental, sienten un vacío
persistente, temen ser abandonados y experimentan episodios de ira intensa o comportamientos impulsivos, como la autolesión.
Históricamente, el enfoque para tratar el TLP ha sido a través de psicoterapias especializadas, siendo la Terapia Dialéctico Conductual y la Terapia Basada en Mentalización algunas de las más eficaces. No obstante, en tiempos recientes, ha aumentado el interés por métodos complementarios como el Neurofeedback, que brinda una opción innovadora para mejorar la regulación emocional y disminuir la impulsividad.
Puedes contar con nuestro centro de Neurofeedback, en Madrid. Nuestro equipo de neuropsicólogos te acompañarán durante todo el proceso.
¿Qué es el Neurofeedback?
El Neurofeedback es una técnica que entrena el cerebro mediante la observación y ajuste de la actividad eléctrica cerebral a través de un electroencefalograma (EEG).Es una forma de biofeedback donde el paciente obtiene información instantánea sobre su actividad cerebral y aprende a controlarla de manera intencional.
En una sesión de Neurofeedback, se colocan electrodos en el cuero cabelludo que recogen las ondas del cerebro. Mediante una interfaz visual o auditiva (como una película que se interrumpe si hay un cambio en el patrón cerebral), se brindan reforzamientos positivos al cerebro cada vez que logra una actividad cerebral deseada, como un incremento de las ondas alfa o una disminución de ondas rápidas vinculadas al estrés o impulsividad. Con la práctica, el cerebro «aprende» a autoajustarse.
¿Por qué puede ser útil en el TLP?
El Trastorno Límite de la Personalidad está relacionado con una desregulación en el sistema límbico (particularmente en la amígdala), una intensa activación emocional y dificultades en las funciones ejecutivas de la corteza prefrontal. Esto conduce a una baja tolerancia al malestar, impulsividad y problemas para contener respuestas automáticas.
-Investigaciones de neuroimagen han mostrado que las personas con TLP presentan:
-Una actividad excesiva en la amígdala, que está relacionada con el miedo, la ansiedad y emociones intensas.
-Una menor actividad en la corteza prefrontal, lo que dificulta el control de impulsos y la regulación emocional.
-Desregulación en cómo se conectan las diferentes áreas cerebrales, lo que puede resultar en estados de disociación y reacciones emocionales elevadas.
El Neurofeedback podría ayudar a restaurar el balance entre estas zonas cerebrales, favoreciendo un control emocional más efectivo, una menor reactividad y una mejor integración cognitiva.
Beneficios del Neurofeedback en el TLP
Aunque el Neurofeedback no reemplaza la psicoterapia, puede ser una herramienta valiosa y complementaria. Algunos de los beneficios que se han observado en entornos clínicos y estudios iniciales incluyen:
Disminución de la impulsividad
-Entrenar la inhibición de ondas rápidas (como las beta altas o la gamma disfuncional) podría ayudar a mejorar el autocontrol, reduciendo reacciones automáticas, impulsivas o autolesivas.
-Mejora en la regulación emocional
El aumento de las ondas alfa o SMR (ritmo sensoriomotor) se ha vinculado con una sensación de mayor tranquilidad, reducción de la ansiedad y una respuesta más controlada frente a situaciones que causan estrés.
-Reducción de la disociación
Numerosos pacientes con TLP experimentan episodios de disociación, donde pierden la conexión con la realidad o con sus emociones. Algunos métodos de Neurofeedback intentan mejorar la integración del cerebro (sobre todo entre los dos hemisferios), disminuyendo estos episodios.
-Mejor capacidad de tolerar el malestar
Al practicar patrones de ondas más estables, los pacientes son capaces de mantenerse en el momento presente durante situaciones emocionales complicadas, sin recurrir a mecanismos poco saludables como la evasión o la autolesión.
-Apoyo a la psicoterapia
El Neurofeedback no necesita que se verbalicen las emociones, lo que lo hace especialmente beneficioso cuando el paciente no puede comunicar lo que siente. También puede acelerar el avance en terapia al facilitar la introspección y la regulación de las emociones.
Protocolos comúnmente utilizados
En el tratamiento del TLP mediante Neurofeedback, se utilizan diferentes protocolos basados en evaluaciones previas (preferiblemente con un QEEG o mapeo cerebral cuantitativo).Algunos de los más frecuentes son:
Aumento de SMR (12-15 Hz) en áreas como Cz o Pz, para mejorar el control inhibitorio y reducir la hiperreactividad.
Inhibición de beta alta (21-30 Hz) en Fz, T3 o T4, para disminuir impulsividad y ansiedad.
Aumento de alpha (8-12 Hz) en regiones posteriores (Pz, P4), con el objetivo de fomentar la relajación y reducir pensamientos intrusivos.
Protocolo Alpha-Theta, que promueve un estado de conciencia profundo que permite trabajar traumas y emociones complicadas.
Evidencia científica
A pesar de que la cantidad de investigaciones sobre Neurofeedback en TLP es todavía limitada, hay resultados alentadores:
Mehler y colaboradores (2018) llevaron a cabo un estudio piloto en pacientes con TLP y trastornos por trauma complejo, notando mejoras en impulsividad y disociación tras un protocolo combinado de alpha-theta y entrenamiento de inhibición de beta.
En una investigación de Peeters et al.(2021), se observó que el Neurofeedback mejoraba la estabilidad emocional y la calidad de vida en pacientes con TLP junto con psicoterapia.
Ros y su equipo (2013) demostraron que el entrenamiento en SMR mejora la conectividad funcional cerebral, lo que podría explicar cambios duraderos en síntomas emocionales.
Aspectos clínicos a considerar
Antes de iniciar un tratamiento de Neurofeedback para TLP, es esencial:
Hacer una evaluación psicológica y neurofisiológica adecuada para identificar patrones cerebrales que no están regulados.
Incorporar el Neurofeedback en un plan de tratamiento estructurado que incluya psicoterapia, psicoeducación y entrenamiento de habilidades.
Definir objetivos claros, alcanzables y medibles junto al paciente.
Realizar evaluaciones periódicas del avance utilizando escalas clínicas y seguimiento de las sesiones.
Conclusiones
El Neurofeedback es una herramienta novedosa y esperanzadora para tratar el Trastorno Límite de la Personalidad. Al impactar directamente en la autorregulación cerebral, puede ayudar a mejorar áreas importantes como la impulsividad, la tolerancia emocional y la integración de procesos cognitivos y emocionales.
No es una solución definitiva ni un tratamiento único, sino que es un recurso eficaz que, cuando lo utilizan expertos formados y se integra en un enfoque que considera diferentes disciplinas, puede proporcionar una opción auténtica para mejorar y estabilizar a quienes sufren esta condición.
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