¿Cómo podemos aceptar la realidad?

¿Cómo podemos aceptar la realidad?

No nos resulta sencillo admitir los problemas, especialmente cuando las cosas no salen como queremos. Nos cuesta aceptar lo que no nos gusta o lo que no cumple con nuestras expectativas. 

La terapia cognitiva conductual es muy útil en estos casos.

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Este tratamiento psicológico también lo tienes disponible de manera online.

Si no aceptamos la realidad y deseamos que todo sea diferente, nos condenamos a sufrir sinrazón. Muchas veces, ese sufrimiento es causado por nuestras reacciones emocionales, actitudes y pensamientos, más que por las consecuencias del problema en sí. “Si no obtienes lo que deseas, sufres». 

Si obtienes lo que no quieres, sufres. Incluso cuando logras lo que deseas, sigues sufriendo porque sabes que no podrás tenerlo para siempre.

La falta de aceptación

Cuando nada nos satisface y siempre condicionamos nuestra felicidad a lograr ciertas cosas, corremos el riesgo de pasar nuestra vida esperando un futuro mejor que nunca llega. Muchas personas piensan que serán felices cuando su situación cambie, cuando obtengan un mejor empleo o encuentren una pareja. 

Creen que solo podrán disfrutar de la vida cuando consigan lo que más desean. El problema de esta forma de pensar es que tendemos a sobrestimar la felicidad que traen algunas situaciones. No aceptar el presente y vivir esperando un futuro mejor puede llevarnos a un estado de insatisfacción constante, conocido como bovarismo. Este síndrome se inspira en el personaje literario de madame Bovary, una mujer que siempre estaba descontenta con su vida matrimonial y que vivía en un mundo de ilusiones.

Esta insatisfacción puede dar lugar a conductas poco saludables que generan aún más frustración, cerrando un ciclo de descontento que nos lleva a la infelicidad.

La aceptación como camino para ser felices

A veces, la vida nos presenta pruebas difíciles, pero ignorar lo que ocurre no cambiará la realidad; de hecho, puede dar lugar a problemas psicológicos debido a la represión de las emociones que nos afectan desde el inconsciente. Es crucial entender que la frustración suele depender de nuestras expectativas. Si alimentamos expectativas poco realistas y no se cumplen, nos sentiremos frustrados e insatisfechos. Este tipo de pensamientos arruina nuestra vida y nos lleva a quejas y amargura. 

Aceptar la realidad tal como es nos ayudará a enfrentar los contratiempos con calma y serenidad.

¿Cómo podemos aceptar las cosas?

No te ahogues en las quejas, busca soluciones. Lamentarte por lo que ha ocurrido no cambiará la situación. Las quejas que no llevan a una acción son una pérdida de energía, una energía que podrías usar de mejor manera para hallar soluciones alternativas. Pregúntate qué te molesta y qué puedes cambiar realmente para mejorar tu situación.

-Aprende a dejar ir. No siempre podrás cambiar las circunstancias, ya que tu nivel de control sobre lo que sucede es limitado. En ese caso, debes aprender a soltar esos pensamientos y sentimientos negativos a los que te agarras.

-Practica la gratitud. En lugar de enfocarte en lo que te falta, recuerda lo que tienes. Llevar un diario de gratitud es una excelente herramienta para aprender a notar todas las cosas valiosas que probablemente estás dando por sentado. Un estudio de la Universidad de California confirmó que llevar un diario de gratitud, una lista de cosas por las que sentirte agradecido, incrementa notablemente nuestra felicidad y satisfacción con la vida en solo diez semanas. 

Sería ideal que cada noche, antes de dormir, escribieras tres razones por las que te sientes agradecido/a. Poco a poco, empezarás a ver la vida de una manera más positiva y encontrarás más razones para sentir gratitud.

-Cambia tu narrativa. No se trata de la historia de lo que has vivido, sino de la manera en que la has interpretado y del papel que has asumido: héroe o víctima, competente o incompetente. En lugar de etiquetarte de forma limitante, enfócate en la situación que te causa malestar. Piensa en lo que no te gusta y en lo que necesitarías modificar para sentirte bien. Cambiar la interpretación que haces de un evento te permitirá aceptar la realidad desde un enfoque más positivo y estimulante.

Conclusiones

Si nosotros enfrentamos ciertas circunstancias, los demás también las tienen. A menudo, la suma de “pequeñas circunstancias” se convierte en factores poderosos que pueden afectar a las personas. Saber analizar va más allá de observar; implica tener perspectiva. 

No es fácil ver el conjunto de las partes. A veces, un evento significativo (como la muerte repentina de un ser querido) puede ser más que suficiente para impactar a una persona de manera profunda. En cualquier caso, si podemos ver esto de antemano, tendremos la ventaja de saber cómo actuar con los demás, cómo ayudar o entender que solo podemos acompañar en un momento difícil.

Tanto a nivel individual como colectivo, un buen análisis de la situación siempre será útil para afrontar la realidad. A veces puede ser dolorosa, pero dicha conciencia nos ayudará a manejar nuestras acciones y adaptarnos mejor a la realidad que vivamos en cada etapa de nuestras vidas. Aceptar implica dejar de identificarnos con ciertas situaciones y, sobre todo, liberarnos de los sentimientos que nos dañan.

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