¿Buscas un psicólogo infantil que ayude a tu hijo de una forma rápida y eficaz?
Psicólogos infantiles con más de 15 años de experiencia
Con las técnicas más eficaces en psicología infantil
Nuevos avances: Unimos Psicología, Neuropsicología y Neurociencia
70€
Evaluación del problema y tratamiento.
Sesiones con el niños y con padres y/o tutores o profesores si es necesario.
55 minutos por sesión.
En nuestro centro tenemos expertos en diferentes áreas, que pueden ayudar a los niños con los siguientes problemas:
Nuestros centros de psicología:
C/ Gran Vía 59, 7º centro
Metro: Plaza de España, Santo Domingo, Callao
C/ Paseo Eduardo Dato 13, Madrid
Metro: Rubén Darío, Iglesia
Hay ocasiones en que una persona especializada en la psicología infantil, puede valorar desde fuera lo que al niño/a le está ocurriendo, y será la que pueda ofrecer más herramientas para afrontar la situación que preocupa, dando herramientas y consejos para que los padres puedan manejar los problemas y dificultades de los niños.
Si tienes dudas o crees que tu hijo/a lo está pasando mal, o que puede tener algunos de estos problemas no dudes en llamarnos, nosotros te ayudaremos, nuestro centro dispone de psicólogos para niños, que podrán ayudarte a conseguir un desarrollo infantil adecuado, y una adecuada salud mental y emocional.
La salud mental y emocional de los niños es más sensible, haciendo que su sistema nervioso esté en un momento delicado, donde aprende a gestionar y reaccionar a la mayoría de estímulos y situaciones que va a tener, por ello conseguir que el niño tenga un desarrollo infantil adecuado es una inversión desde el nacimiento y para toda la vida.
En el proceso de ayuda para niños, el psicólogo infantil realizará una evaluación del problema, para conocer el problema que está teniendo el niño en su desarrollo infantil, proponiendo unos objetivos para los niños y los padres, y ayudando a los padres con consejos para mejorar la salud mental y emocional de los niños desde el inicio del tratamiento.
Los padres conseguirán entender y comprender qué tienen que hacer, y además tendrán herramientas para ayudar a sus hijos con su salud mental y bienestar, y los niños tendrán técnicas para poder manejar sus situaciones difíciles, y aprenderán técnicas de autorregulación.
Tanto los padres como los niños se sentirán acogidos por el psicólogo infantil, sin actitud crítica y entendiendo la dificultad de ser padre y madre hoy en día, y los pocos recursos que tienen los padres con los niños desde el nacimiento.
En nuestro centro tenemos expertos en diferentes áreas:
Psicología infantil clínica: dirigida a mejorar las emociones, pensamientos, síntomas y comportamientos de los niños y hacerlos más adaptativos y funcionales.
Utilizamos técnicas como Terapia Cognitivo Conductual, EMDR, Mindfulness, Relajación, Psicoeducación a los padres o tutores.
Evaluación Neuropsicológica y tratamiento neuropsicológico: estudia la relación entre el cerebro y la conducta, con evaluaciones y tratamientos sobre procesos cognitivos como la atención o el lenguaje.
Realizamos evaluaciones neuropsicológicas para presentar en colegios y equipos de orientación.
Neurociencia y Neuromodulación: Utilizamos téncnicas de neurociencia como neurofeedback, Mapeo Cerebral QEEG o Tdcs, con una gra eficacia en cambiar los patrones neuronales y mejorar las capacidades cognitivas.
Nuestra forma de intervenir en psicología infantil consiste en:
Sesiones con psicóloga infantil: Nuestros psicólogos infantiles utilizan las técnicas más eficaces dependiendo de la evaluación.
En IPSIA los psicólogos infantiles de nuestro centro están especializados en psicología infantil, con una formación contínua en las técnicas más eficaces.
Nuestros psicólogos infantiles te ayudarán, sin juzgar sus actitudes y comportamientos como padres; ya que simplemente pidiendo ayuda a un profesional de la psicología infantil se está haciendo todo lo posible para la mejora la salud mental y emocional de su hijo.
Los psicólogos infantiles le ayudarán a entender el origen y mantenimiento del problema, le darán herramientas para ayudar más rápidamente a su hijo e intervendrá para dar soluciones al problema con la máxima eficacia.
La evaluación neuropsicológica es una herramienta fundamental para detectar comprender en profundidad las dificultades de que presenta el niño o adolescente más allá de lo conductual y emocional. Esta evaluación permite identificar causas cognitivas subyacentes y los recursos personales del menor.
La evaluación neuropsicológica infantil permite conocer en profundidad el funcionamiento cognitivo a través de pruebas estandarizadas, entrevistas y observación clínica, se obtiene un perfil detallado de sus fortalezas y dificultades, lo que resulta fundamental para orientar adecuadamente el tratamiento y las intervenciones escolares en casos como:
Nuestro centro de psicología infantil une las técnicas psicológicas más novedosas junto con tratamientos dirigidos a profundizar en los cambios neuronales provenientes de la neuromodulación.
Mapeo Cerebral (QEEG o Electroencefalografía cuantificada): medición del funcionamiento cerebral, un Electroencefalograma (qEEG), que es una medición totalmente objetiva de cómo funciona el cerebro, para ellos se colocan sensores en el cuero cabelludo que captan la actividad eléctrica del cerebro en sus diferentes partes, es indoloro y no invasivo.
Se entrega un informe personalizado de la actividad cerebral con imágenes de su actividad y con más de 40 páginas, con las referencias científicas encontradas relacionadas con su problemática y el tratamiento personalizado a seguir.
Tdcs: La Estimulación Transcraneal por Corriente Directa (tDCS) es una técnica no invasiva de neuromodulación que aplica una corriente eléctrica de baja intensidad (generalmente entre 1–2 mA) sobre el cuero cabelludo para modificar la excitabilidad cortical.
Neurofeedback: se ponen sensores en el cuero cabelludo, que no son invasivos, ni producen electricidad, solo registran la actividad del cerebro, para enviarlas a un ordenador que procesa la información y proporciona una retroalimentación o «feedback» cuando la persona aprende a llegar a la actividad cerebral que queremos, consiguiendo así que la persona aprenda sobre su propia actividad neuronal, aprendiendo a regularse a si mismo por el entrenamiento.
Puede parecer que los niños no tienen problemas o que estos son menos urgentes o importantes, algunos padres creen que los problemas se resolverán solos y que los problemas de conducta o emocionales de los niños son pasajeros.
Pero la verdad es que los padres subestiman los problemas de los hijos, sus preocupaciones y ansiedad, y piensan que tiene más capacidad para el bienestar de la que tienen.
Algunas situaciones pueden superar la capacidad psicológica y emocional que pueden tener los niños según su edad. Si notas algunos síntomas emocionales o conductas disrruptivas que se prolongan un psicólogo infantil puede ayudarte.
Los niños tienen emociones, rabietas y comportamientos disruptivos como todos, pero es conveniente ir al psicólogo infantil cuando hay conductas que no son las adecuadas a su edad o las emociones y síntomas de ansiedad, miedo o tristeza se mantienen en el tiempo.
SI notas que las conductas son persistentes en el tiempo y que esto provoca problemas en el niño como problemas con otros niños o problemas académicos.
Puede haberr dudas de si una conducta es adecuada a cierta edad, si tienes dudas de cómo ayudar a tu hijo puedes pedir cita con un psicólogo infantil que hará una evaluación de tu caso y te dará las mejores opciones. Si no se interviene en el prorblema, un comportamiento aislado se convierte en un patrón de conducta problemático, un psicólogo infantil ayuda a saber de qué forma hacerlo.
También puede haber problemas cuando el niño tiene problemas para relacionarse con amigos o para aprender, es necesario atajar estas dificultades pronto para que no le influyan en su desarrollo.
En IPSIA los psicólogos infantiles de nuestro centro están especializados en psicología infantil, con una formación continua en las técnicas más eficaces.
Algunas señales frecuentes que pueden motivar una consulta son:
Cambios bruscos en el estado de ánimo: tristeza, irritabilidad, apatía.
Problemas de conducta: desobediencia, agresividad, rabietas desproporcionadas.
Dificultades en el colegio: bajo rendimiento, falta de atención, rechazo a asistir.
Miedos intensos o ansiedad por separación.
Retrocesos en el desarrollo: volver a hacerse pis, hablar como un bebé, etc.
Aislamiento social o dificultades para relacionarse con otros niños.
Baja autoestima, inseguridad o frases negativas sobre sí mismo.
Dificultades en el sueño, la alimentación o la gestión de rutinas.
No es necesario esperar a que el problema sea grave. Cuanto antes se interviene, más fácil es apoyar al niño y evitar que la dificultad se cronifique.
El psicólogo infantil evalúa y acompaña al niño desde una comprensión integral de su desarrollo emocional, cognitivo y social. Su objetivo es ayudarle a:
Comprender y expresar lo que siente.
Superar bloqueos emocionales.
Adquirir habilidades para afrontar retos o conflictos.
Mejorar su adaptación en casa, el colegio y con sus iguales.
Además, asesora a los padres para que puedan acompañar mejor a su hijo, reforzar su autoestima y establecer límites adecuados. En muchos casos, el trabajo con la familia es tan importante como el trabajo con el niño.
Se recoge información sobre el desarrollo del niño, la historia del problema, el contexto escolar y familiar, y se valoran los objetivos de la consulta.
Posteriormente, se acuerda un plan de trabajo que puede incluir:
Evaluación psicológica o neuropsicológica.
Sesiones individuales con el niño.
Orientación a padres.
Derivación o coordinación con el colegio si es necesario.
Cada caso es único y el enfoque se adapta a la edad, las necesidades y el tipo de dificultad del menor.
El trabajo terapéutico varía según la edad y el motivo de consulta. En los niños pequeños se utilizan principalmente herramientas lúdicas: juego, dibujo, cuentos, títeres, dinámicas emocionales. En niños mayores y adolescentes se pueden aplicar técnicas cognitivo-conductuales, entrenamiento en habilidades sociales, relajación o trabajo con metáforas.
En todos los casos, el niño se siente acompañado en un espacio seguro donde puede expresarse sin juicio. El psicólogo establece una alianza de confianza para que el niño pueda hablar, comprender lo que le pasa y desarrollar recursos propios para sentirse mejor.
Sí. La implicación de los padres es clave para que la intervención tenga éxito. En muchas ocasiones se realizan sesiones de orientación familiar en paralelo, donde se ofrecen pautas educativas, estrategias de comunicación y apoyo emocional. El psicólogo acompaña también a los adultos en el proceso de entender y responder mejor a las necesidades de su hijo.
Muchas personas no saben cuando sus hijos necesitan un especialista, ese punto es algo individual y subjetivo, pero hay situaciones objetivas en las que un psicólogo infantil mejoraría la vida del niño:
Está viviendo o ha vivido una crisis importante en la familia: pérdida del trabajo, mudanza de vivienda, cambio de escuela, muerte de un familiar o alguien allegado, una enfermedad grave, separación de su pareja,…
Su hijo tiene problemas en la escuela, acoso escolar, fracaso escolar, malos resultados, etc.
Su hijo tiene malas relaciones con sus compañeros, o sufre acoso escolar.
Si castiga a sus hijos física y/o emocionalmente.
Su hijo utiliza la agresividad con usted.
Su hijo es demasiado activo, impulsivo e inquieto, son síntomas de un sistema nervioso muy alterado.
Su hijo está deprimido, ha perdido interés por la vida, ha intentado hacerse daño a sí mismo o suicidarse o nota que su salud mental y emocional no son adecuadas.
Si su hijo es adoptado y además ud. le preocupan demasiado los aspectos de la adopción o a su hijo le preocupa demasiado el tema de la adopción.
La conducta, personalidad y amistades del niño han cambiado de forma drástica.
Ud. no se siente capaz o con fuerzas o tiene dudas para encarar algún problema, o necesita consejos para mejorar la salud mental y el bienestar de su hijo.
Mi hijo de 12 años tenía mucha ansiedad y estaba siempre inseguro, después de unas sesiones aprendió a manejar los pensamientos que le producían ansiedad y ahora se le ve feliz y contento.
Ana, madre de Javier 49 añosEn el colegio nos dijeron que Gonzalo tenía problemas de relación con otros niños desde hacía algunos años, habíamos intentado otros tratamientos pero no nos funcionaron, cuando vinimos aquí, desde el inicio nos dieron consejos para ayudar a nuestro hijo a tratar con sus compañeros de clase. Ahora él tiene mejor salud mental y se siente mejor, ya no tiene ansiedad por ir al colegio.
Franciso, padre de Gonzalo 42 añosDesde el nacimiento nuestro hijo lloraba mucho, no creímos que fuera importante, pero cuando tenía 2 años nos dimos cuenta que era muy movido y que tenía muchos impulsos que no veíamos en otros niños. Cuando conocimos a Sandra nos ayudo y nos dio consejos para aprender a manejar a Sergio
Sara, madre de Sergio 44 añosNos dimos cuenta que mi hijo lo estaba pasando mal cuando vimos que tenía mucha ansiedad por ir al colegio y ver a los otros niños, luego nos dimos cuenta que mi niño desde siempre había sido así, no sé si desde el nacimiento, pero siempre había sido tímido. Cuando llegamos a este centro, la psicóloga infantil hizo que se sintiera bien y le dio ejercicios desde el principio adaptados a niños, notamos desde el principio que su ansiedad disminuyó y que se sintió mejor para ir al colegio.
Ana, madre de Juan 37 añosC/ Gran Vía 59, 7º centro
Metro: Plaza de España, Santo Domingo, Callao
C/ Paseo Eduardo Dato 13, Madrid
Metro: Rubén Darío, Iglesia